En los últimos meses han ido proliferando una serie de artículos de opinión que comentaban que el diseño web está muerto. El más destacado (y probablemente el primero) de estos artículos de opinión fue el de Sergio Nouvel, publicado en junio de 2015.
Nouvel enumera una serie de razones o “síntomas”, como él los llama, por los que opina que el diseño web está muerto:
Primer síntoma: “Comoditización” por templates
Un Commodity, es un producto sobre el que no se pueden percibir diferencias entre dos unidades distintas del mismo. Refiriéndonos a diseño web, la “comoditización” es lo que pasa cuando el servicio no presenta ningún valor añadido respecto al ofrecido por otra empresa.
Esto se da cuando la mayoría del contenido que se ve en la web actualmente está basado en sistemas basados en algún framework, servicio o CMS, como WordPress, Drupal, Blogger, etc. Esto da la ventaja de poder utilizar una serie de “atajos” a la hora de crear una web propia, haciéndolo mucho más fácil para todo el mundo y prescindiendo de un técnico que realice cambios o mejoras en dicha web.
Segundo síntoma: Las técnicas y patrones de diseño web han alcanzado la “madurez”
¿Cuánto hace que no surge ningún tipo de innovación considerable en diseño web? El Responsive Design hace ya mucho tiempo que anda con nosotros aunque parezca relativamente nuevo y en mi opinión no hay nada más destacable que suponga ningún tipo de revolución.
Los patrones de diseño web están completamente instaurados, la mayoría de webs tienen un funcionamiento similar y reconocible para los usuarios. Cualquier usuario medio puede identificar cada uno de los elementos existentes y utilizarlos sin ningún tipo de problema.
Tercer síntoma: La automatización y la inteligencia artificial ya están haciendo ese trabajo
Han surgido una tendencia de servicios de diseño web (theGrid.io, al frente de ellos) que mediante un sistema de inteligencia artificial toma decisiones de diseño. Estos servicios analizan tu contenido de manera que detecta las mejores estructuras de página, colores, tipografías, etc., para tu sitio web.
Cuando algo se puede automatizar de manera satisfactoria, significa que las prácticas y estándares en ese ámbito están lo suficientemente establecidos para que no se necesite demasiada interacción humana.
Esto es solamente el principio, obviamente irán apareciendo más servicios de este tipo que competirán entre sí para ver cual es el que es capaz de dar un resultado más rápidamente y con menos interacción humana.
Cuarto síntoma: Las páginas de Facebook como la nueva página web de los negocios pequeños
En los 90, con el inicio de la proliferación del acceso a Internet, lo típico era contratar a un webmaster que “diseñara” tu página web y la alojara en algún hosting cualquiera para darte a conocer en Internet. Más tarde, sobre 2005 aproximadamente, lo típico era abrir una página en WordPress.com o Blogger.
Actualmente todo esto ha quedado obsoleto y ha sido sustituido por las páginas de Facebook. Debido a que son gratuitas, se alojan en una plataforma muy visitada y que ofrecen herramientas y servicios para los negocios que antiguamente se ofrecían bajo el pago de una suscripción, han hecho que para mucha gente sea la solución idónea para su negocio simplemente por que no necesitan más que eso.
Quinto síntoma: Los dispositivos móviles están matando la web
¿Cuantas veces visitas una página web desde tu móvil introduciendo directamente su URL en el navegador? Independientemente de esto la mayoría de la gente ya no piensa en el concepto de página web como antaño. Tienen en mente que hay un acceso a “cierta” plataforma que le proporciona algún tipo de información sobre el servicio que ofrece, y acceden indistintamente desde un navegador o desde una app.
Las páginas web en móvil siempre han sido mucho más lentas que su versión de escritorio debido a, en primer lugar al dispositivo desde el que se accede y en segundo lugar la conexión a Internet de la que se dispone. Actualmente se accede a Internet muchísimo más desde dispositivos móviles. Si el acceso a una página web, la cual no dispone de adaptación a móviles (totalmente inviable a día de hoy), además resulta lenta desde los mismos, hará que la gente acceda al mismo contenido desde otros sitios que le den la misma información o servicio con una mayor rapidez.
El diseño web no está muerto
A pesar de que la serie de razones que expone Sergio Nouvel son totalmente acertadas, afirmar que el diseño web está muerto es un poco arriesgado. Todos los servicios tienen una época en la que se demandan muchísimo debido a las tendencias del mercado y las exigencias del mismo en dicho momento. Cuando se estandarizan dichos servicios y la oferta es muy grande, la demanda se reduce y se estabiliza.
En nuestro caso, la evolución constante de Internet hace que además de reducirse la demanda, se transforme y se propague hacia otros campos relacionados. ¿Tiene algo que ver el diseño de webs con el diseño de apps? En parte sí. Las aplicaciones tal como las conocemos a día de hoy, surgieron para cubrir una necesidad que no podía cubrir la plataforma que las vio nacer. Que la web reduzca su público pero que dicho público acceda a esa información desde otros puntos no es nada más que una diversificación del público objetivo que hay que saber afrontar como profesionales del medio.
El diseño web no está muerto, simplemente ha ido evolucionando. Habrán clientes que optarán por una plantilla prediseñada o por un servicio automatizado ya sea por comodidad, por precio o por cualquier otra razón, pero siempre va a haber quien no se conforme con eso o quien necesite una solución personalizada porque su negocio así lo demanda.
El diseño web no es solamente estético. El diseño web está compuesto de una gran variedad de elementos y factores que consiguen que el usuario tenga una experiencia satisfactoria a la hora de utilizar tu producto digital, página web o tienda online. No sirve de nada que utilices una plantilla prediseñada para tu negocio sin tener en cuenta la estrategia de márketing a seguir, la coherencia estética de todos los medios en los que se encuentra tu marca digital y al público al que te diriges.
Además de todo esto, las alternativas a las soluciones web personalizadas tienen una serie de inconvenientes que los usuarios no siempre tienen en cuenta. Tal como antes decía, la web móvil siempre ha sido muy lenta debido a varios factores.
Si a esto sumamos el hecho de utilizar soluciones de diseño web genérico (aparte de lo que conlleva que sea genérico), al estar preparado este para muchos escenarios posibles, tiene que cargar muchas funcionalidades que ralentizan la carga de la web. Todo esto influye en el posicionamiento web y en la conversión, por lo que son factores que se tienen que medir a la hora de comprobar la efectividad de la solución web por la que se ha optado. Y esto no sólo afecta en dispositivos móviles, una carga excesivamente lenta también afectará a la experiencia de escritorio de la cual no debemos de olvidarnos.
El diseño web está lejos de estar muerto. Todavía le quedan muchas cosas por ofrecer a la red y a todos sus servicios interconectados. Qué le queda por ofrecer, no lo puedo decir yo, porque el avance de la tecnología es impredecible e imparable, pero si una cosa tengo clara es que será muy emocionante ver cómo cambian las cosas.