A partir del 21 de abril de 2015, todos los sitios web que no sean responsive, y no se adapten a la actualización del algoritmo de Google, perderán su posicionamiento en los resultados de búsqueda a través del móvil, según ha indicado Google. Una noticia que ha hecho temblar a todos los responsables de sitios web que carecen de diseño responsive, muchos ven peligrar su posicionamiento SEO e incluso sus ventas on line a través de estos dispositivos.
Según el VI Estudio Anual Mobile Marketing 2014, 9 de cada 10 internautas tienen un smartphone, lo que significa que más de la mitad de la población navega cada día a través del móvil. Entre los datos más relevantes, destaca que más del 80% de usuarios acceden con el móvil a redes sociales y a su cuenta de email, al menos una vez a la semana.
Además, este es un dato que crece entre usuarios con edades comprendidas entre 36 y 55 años, un rango de edad que se ha sumado a las nuevas tecnologías de forma casi obligatoria. Estas cifras muestran la necesidad de tener en una página web con diseño responsive, es decir, un diseño que permita visualizar correctamente redimensionada nuestra web en cualquier dispositivo, incluido el móvil.
En los últimos años, hemos pasado de consultar en el PC las últimas noticias nacionales, los resultados del partido del sábado o si lloverá el fin de semana, a informarnos a través del móvil. Nos hemos aliado con las aplicaciones móviles para saber qué hacen nuestros amigos en Facebook o convertir un tweet en trending topic, incluso damos el salto y realizamos compras online con nuestro smartphone.
Cerca del 50% de usuarios, según el VI Estudio Anual Mobile Marketing 2014, han realizado alguna vez una compra usando como dispositivo su Smartphone y los internautas navegan de media por día cerca de 2,30 horas con su móvil. Por tanto, es imprescindible, sino queremos perder compradores y lectores, aplicar un diseño responsive a nuestro sitio web.
Ventajas Responsive
Las ventajas de tener un sitio web responsive no se limitan a complacer los requisitos de Google, ni a evitar perder lectores o ventas, va más allá. Responsive equivale a mejorar la experiencia del usuario cuando entra en una página web, desde navegar con mayor facilidad, hasta evitar las imágenes mal dimensionadas, que, además, dan una mala imagen de marca.
Por otro lado, un diseño web responsive puede proporcionarnos una mayor visibilidad en cualquier soporte, sin necesidad de crear y redirigir a nuestros usuarios a la “versión móvil” de la web. Además, gracias al menú redimensionado el usuario navegará con mayor facilidad por nuestro sitio web, reduciendo el porcentaje de rebote. Asimismo, favorece las ventas online y el ratio de conversión, ya que el comprador está familiarizado con la navegación tanto del PC como del móvil.
Además, disponer de una sola URL nos permite, gracias a herramientas como Google Analytics, seguir los pasos que da nuestro usuario por la web responsive, así como saber cuantos usuarios usan el móvil para acceder a nuestra web, cuales son las publicaciones más consultadas a través del móvil o que cantidad de compras se hacen desde este dispositivo. Datos que nos pueden ayudar a mejorar el enfoque de las campañas de marketing hacia un público más dinámico y usuario del Smartphone.